La política está en la sangre de los Koofi. El padre de Fawzia fue miembro del parlamento durante veinticinco años y un político muy apegado a la tradición afgana. Cuando fue asesinado su madre, analfabeta, decidió mandarla al colegio. Mientras la guerra civil se recrudecía Fawzia destacaba en clase y terminaba sus estudios de medicina. Se casó con el hombre al que amaba y tuvieron dos hijas muy queridas: Shuhra y Shaharzad. La llegada de los talibanes puso fin a estas libertades de forma trágica. Su marido fue torturado y tras su muerte Fawzia descubrió la política. En 2005 fue elegida para el parlamento. Tuvo el cargo de portavoz de la cámara baja de la Asamblea Nacional de Afganistán, fue nominada en 2009 al premio a la Líder Joven Global del Foro Económico Mundial y ahora es la representante de la provincia de Badakhshan.
La situación de incertidumbre a la que hace frente cada día la ha llevado a escribir cartas a sus dos hijas antes de salir de casa, ya que no sabe si volverá con vida.
En Cartas a mis hijas Fawzia Koofi nos cuenta en primera persona la historia de Afganistán marcada por las leyes de los muyahidín y de los talibanes, y su experiencia en la guerra y las consecuencias que aquellos trágicos acontecimientos tuvieron en las mujeres de su país.
Cuadernos de Memoria es la colección de memoirs de Aguilar. Testimonios de vida, historias de superación o realidades en primera persona que mueven al lector y lo transforman. Historias reales que se leen como una novela.