En el juego del amor, un buen pase puede ser decisivo.
Zoe siempre ha sido una chica tímida. Con el pretexto de ayudarla, una amiga de la universidad la desafía a cometer la locura más grande que se le ocurre: besar a un desconocido. Así que, durante una fiesta universitaria, se ve obligada a seguir a Dylan, el jugador estrella del equipo de fútbol americano, para intentar cumplir el reto.
Lo que Zoe no imaginaba es que, accidentalmente, acabaría viendo partes de la anatomía de Dylan que no pretendía. No puede besarlo ahora. No después de su bochornoso encuentro, y mucho menos después de que él le confesara que tiene novia. Pero cuando Dylan se entera del desafío de Zoe, se propone ayudarla: si alguna vez se vuelven a cruzar y los dos están solteros, se besarán.
Dos años más tarde, el destino interviene y hace que ambos terminen siendo compañeros de piso sin pretenderlo. Ahora Zoe ve a Dylan con mucha más frecuencia de lo que esperaba. ¿Podrán resistirse a dejar pasar esa nueva oportunidad?
«Si te gustan las historias dulces y slow burn, Dylan y Zoe están a punto de dejarte con la boca abierta».
-Shelly, Bookgasms Book Blog