La vida de Francisco de Goya (1746-1828) coincidió con una época de transformaciones en la historia de España que desató turbulencias en la política del país y en la corte de la que formó parte el artista, así como cambios sociales, la devastación de la península ibérica en la guerra contra Napoleón y un posterior periodo de inestabilidad. En esta reveladora biografía, Janis Tomlinson se sirve de un amplio rango de documentos (incluyendo cartas, escritos de la corte y un cuaderno de bocetos usado por Goya en los primeros años de su carrera) para ofrecer un matizado retrato del complejo y multifacético artista, cuyo arte es sinónimo de las cautivadoras imágenes de las gentes, los acontecimientos y la revolución social que definieron su vida y su era.
Tomlinson cuestiona la imagen popular del artista como una figura obsesionada con la oscuridad y la muerte, al mostrar cómo la simpatía y la ambición de Goya contribuyeron a su éxito dentro de la corte, y al ofrecer también nuevas perspectivas sobre su juventud, rica vida familiar, amplios viajes y duraderas amistades. Tomlinson explora todo el potencial de la imaginería goyesca, desde escenas inspiradas por la vida en Madrid hasta visiones de mundos irracionales, pasando por retratos reales y atrocidades de guerra. La autora arroja luz sobre los problemas personales del artista, incluyendo la muerte de seis de sus hijos y su pérdida de audición en la mediana edad, pero también reexamina la interpretación convencional de que los últimos años de vida de Goya fueron un período de desilusión y los muestra, en cambio, como una época de liberación artística, que se plasma especialmente en las famosas pinturas murales de su quinta,
conocidas popularmente como las pinturas negras.