Es LUNES, otra vez. Repasas la lista de tareas pendientes mientras la bandeja de entrada del email te muestra todos los correos electrónicos que esperan respuesta. Miras el calendario, buscando los días festivos, las vacaciones, y tachas un día más… o menos.
A tomar por curro es una visión divertida de las cosas menos divertidas de la jornada laboral, porque todo se sobrelleva mejor con un toque de humor.