El poliédrico y epicúreo Fernán Gómez se inclinaba por el arte de la escritura: 'De entre estas cosas, la de actuar, la de dirigir y la de escribir, elegiría esta última, porque me produce más placer que las otras dos' y concebía la vida como teatro, 'se sabe desde los tiempos clásicos. Y si es teatro lo es porque no sólo los actores, sino todas las demás personas representan, actúan, interpretan.' Este volumen reúne por primera vez el teatro de Fernando Fernán Gómez. Contiene, además de todas las obras dramáticas publicadas en vida del autor (algunas de la magnitud de La coartada o de la trascendencia de la aplaudidísima Las bicicletas son para el verano), otros muchos textos que fueron llevados a escena pero que permanecieron inéditos (tal es el caso de Ojos de bosque o de Del rey Ordás y su infamia) y, también, una serie de grandes descubrimientos (Relámpagos, Soldado?) hasta ahora desconocidos y, por tanto, nunca representados ni editados. En total, sesenta y nueve años de escritura teatral que comienzan con El guiñol de Papá Dick, en 1938, y concluyen con El mundo de Arniches, en 2007, año de su muerte, aunque no de la desaparición del enorme legado que nos deja.