En la era de la tecnología y el impacto de la multiculturalidad en nuestras comunidades, es cada vez más necesario el cultivo de las habilidades de comunicación. Sin embargo, la inmensa mayoría de los ciudadanos nos comportamos no verbalmente de manera intuitiva, siguiendo unos patrones culturales adquiridos y cediendo todo el protagonismo a la palabra. Nos expresamos no verbalmente, pero nos falta conocer la técnica y los conocimientos para decodificar los mensajes de los demás y adaptar los nuestros en función de lo que queremos transmitir.