Las cosas no pueden ir peor. Cale, Mayo y Arco están castigados en el colegio y ahora Casi debe ir solo a la dragonería para cuidar a las crías de dragón mientras Antón y unos hombres intentan sorprender a la banda de ladrones. A Casi no le gustan mucho las aventuras, pero cuando Mofeta, uno de la banda, le dice que puede ayudarlo a recuperar las otras crías, el chico tiene que tomar una decisión. ¿Debería fiarse o será una trampa? Solo hay una manera de averiguarlo.