Por supuesto, ser letrista de canciones no presupone ser poeta. Sin embargo, no es este el caso del líder de los Doors, que después de componer y grabar una de las obras más importantes en la historia de la música rock ?"L.A. Woman"? renunció a los favores de la gloria y eligió el 'viaje tranquilo' para imponerse como escritor. Antes de que la muerte le poseyera en julio de 1971 en París, donde se había traslado definitivamente para preparar su obra literaria, JIM MORRISON ya había visto publicados tres libros de poemas: Las nuevas criaturas (1968), Los señores (1969) y Una oración americana (1970) ?este último también publicado en disco e incluido en el libro Canciones de Jim Morrison (número 80 de esta misma colección).
Sus textos visuales e hipnóticos, místicos y groseros, impregnados de alucinaciones verbales donde la palabra estalla en miles de destellos, revelan a un poet; densamente amoral y trágico, sublime y filosófico, dionisiaco, cuya alma atormentada alberga sombras de Blake, Nietzche, Freud y Poe, o la maldición de los poetas franceses más evidentes: Verlaine, Apollinaire, Baudelaire y, sobre todo, Rimbaud. Bestiario mitológio-personal de CHAMÁN JIM.
La antología se completa con Desierto (número 163 de esta misma colección), un segundo poemario de MORRISON que recoge el resto de su producción.