En un mundo urbano completamente alejado del campo, las hortalizas pueden resultar más exóticas que muchas plantas ornamentales importadas de países lejanos. Por ello, cultivar un pequeño huerto en nuestro balcón nos introduce en un mundo nuevo y fascinante: conocer distintas hortalizas, cuidarlas en su creciemiento, aprender qué les conivene en cada momento, decidir cuándo deben recolectarse.
Cuidando un huerto tenemos la oportunidad de vivir un retorno al mundo natural - sea en família o inividualmente- porque establecemos un poderoso vínculo con el ciclo de la vida. Hundimos nuestras manos en la tierra, regamos y abonamos las plantas, nos preocuparnos por ellas, asistimos a la maravilla de su desarrollo y maduración...
Siguiendo las pautas de esta guía, recuperaremos el sabor auténtico de las hortalizas y comeremos de manera sana todo el año: alcachofas, tomates, canónigos, lechugas, endibias, fresas, melones, cebollas, pimientos, zanahorias, etc.
Los trucos imprescindibles y los consejos más sabios para cultivar con éxito nuestro pequeño huerto.