Un profesor de universidad que ha rodado por Europa como una bola del
desierto sin echar raíces en ningún lugar, regresa a Ibiza, donde pasó sus
mejores años de joven, para asistir junto con su hijo, del que vive separado hace ya tiempo, a la lluvia de estrellas de la mágica noche de San Lorenzo. La contemplación del cielo, el olor del campo y del mar y el recuerdo de los días pasados desatan en él la melancolía, pero también la imaginación.
Llamazares regresa al género novelístico con una obra magistral en la línea de La lluvia amarilla, del que vendió más de 200.000 ejemplares.