Sunless, un hombre con algunos problemas psicológicos, acude al hospital PharmaLake, en Salt Lake City, donde curan
con píldoras toda clase de trastornos. Pese al tratamiento, Sunless sigue mostrando
síntomas de esquizofrenia: cree, por ejemplo, que las moscas son temibles espías y ve conspiraciones en todas partes.
No obstante, todo da un vuelco cuando se entrevé la posibilidad de que, en
realidad, Sunless sea fruto de la imaginación de un joven llamado Salt. Así arranca esta entrañable sátira sobre la capacidad de la mente para crear mundos paralelos, un inteligente relato sobre los peligros
de la búsqueda de la propia
identidad y el autoconocimiento,
que acaba convirtiéndose en una crítica feroz no sólo de las empresas farmacéuticas, interesadas sólo en vender productos, y de esa psiquiatría que en todo ve un trastorno, sino también del delirante mundo
actual.