"La métrica del olvido", de Luis Ingelmo, es como un
jardín botánico en primavera donde descubrimos todo
tipo de plantas imaginarias reunidas en un mismo terreno.
Paseando por las páginas de este libro hallamos:
amistades bien abonadas, imprevistos cultivados, disgustos
sembrados, amores en floración, aventuras brotando,
desgracias por desyerbar o equivocaciones que
esperan ser podadas. Este recorrido por la avenida del
parque floreciente nos atraerá con el canto del gorrión
tullido, con la fragancia de la naranja enamorada o con
el sabor del alcohol penoso. La risa irónica nos dará un
aire intelectual y la alegría de la buena escritura nos
hará paladear los frutos de la calidad máxima.