La vida de Andrew Whittaker se derrumba: la revista literaria que dirige está a un paso de la bancarrota, su edificio se cae a trozos y su mujer se ha ido. Sin embargo, Andrew no abandona. Es una máquina de crear proyectos, ilusiones y deseos vanos. Y escribe sin parar: bocetos de novelas, cartas de rechazo a aspirantes a escritores y delirantes invitaciones a antiguos compañeros con más éxito que él, listas de la compra, carteles para sus incívicos vecinos… El lamento del perezoso se compone de los textos que Andrew escribe durante cuatro intensos meses.