En Un año en el altiplano, Emilio Lussu rememora sus experiencias en el altiplano de Asiago desde junio de 1916 hasta julio de 1917, cuando, como miembro de la Brigada Sassari, combatió en el frente italo-austríaco durante la Primera Guerra Mundial.
Considerada como una obra maestra de la literatura bélica, Un año en el altiplano es el emotivo relato de un año de continuos asaltos a trincheras inexpugnables, de batallas absurdas empeño de oficiales embebidos de retórica patriótica y de vanidad, de episodios trágicos, grotescos o cómicos a través de los cuales la guerra se revela en su verdadera naturaleza. Su relato de prosa sencilla es una contundente descalificación de la guerra y de los mandos italianos; describiendo con cercanía y humor la situación y el día a día de los soldados, en su mayoría campesinos y obreros, consigue una visión de las batallas y ejércitos muy distinta a la oficial.
Debido a la militancia antifascista de su autor, el libro vio la luz primero fuera de Italia, y no sería hasta 1945 cuando apareciera por primera vez en ese país, publicado por Giulio Einaudi; desde entonces no ha dejado de conmover a los lectores que se han acercado a él.