Richard Dedekind tuvo el privilegio de poder crecer tras las huellas de ese coloso de los números que fue Gauss. Después fue alumno, amigo y albacea de la herencia científica de Dirichlet y Riemann. Su intercambio con Cantor sirvió para que Dedekind decidiera que era el momento de publicar su obra más madura: ¿Qué son y para qué sirven los números? Creció a la sombra de estos gigantes, pero nunca tuvo la intención de alzarse sobre sus hombros, ni la ambición de ser considerado como su igual.
Dedekind ideó una forma muy original de construir los números reales y diseñó diferentes estructuras para investigar los números algebraicos. Por esto, a fuerza de diseñar y construir bien, se convirtió en el arquitecto de los números.
Carlos Sánchez Fernández es doctor en matemáticas por la Universidad Lomonosov de Moscú y catedrático de la Universidad de La Habana. Es autor de numerosos libros, entre ellos biografías de los Bernoulli, Kolmogórov y Abel.
L. G. González Ricardo es profesor de la Universidad de La Habana y se ha especializado en la escuela alemana de matemáticas que se desarrolló entre 1860 y 1930, a partir de la obra de Dedekind y hasta que el ascenso del nazismo estimulara su ocaso.