Israel: Natasha, 12 años, sufre los inconvenientes de ser hija de un matrimonio formado por un padre árabe y una madre judía. La familia vive en un ambiente determinado por la desconfianza hacia la población árabe. Esa situación empeora cuando el padre es detenido, acusado de colocar una bomba en una tienda, cuyo propietario, judío, resulta herido.
A partir de ese momento, Natasha se convierte en la hija del "sospechoso" e irá comprobando las distintas reacciones de mucha gente.