Los insectos sociales -entre ellos las abejas, hormigas, avispas y termitas- han provocado siempre fascinación de los hombres, maravillados por la idea de una sociedad sólida y regida por reglas inflexibles, en la que cada individuo tiene una competencia definida y nada es dejado al azar. Sin embargo, recién con la publicación de esta obra se completa el cuadro que explica el funcionamiento de las sociedades de insectos.
Basado en investigaciones realizadas a lo largo de dos décadas, el libro muestra cómo los superorganismos -esas colonias cohesionadas formadas por cooperación altruista, comunicación compleja y división del trabajo- representan uno de los estadios básicos de la organización biológica, a medio camino entre el organismo y la especie.
Al celebrar la "belleza y elegancia de las asombrosas sociedades de insectos", Hölldobler y Wilson se abstienen de cualquier extrapolación al mundo de las sociedades humanas y permanecen anclados en el ámbito específico de la historia natural. De allí, la fortaleza y el atractivo de este libro destinado a modificar nuestra comprensión de las sociedades de insectos, en las que pocas y simples reglas seguidas por seres cuyo cerebro no es mayor que un grano de sal dan lugar a un milagro de inteligencia: una "civilización" de la cual están ausentes la conciencia y la razón.