Este brillante ensayo explica, ante todo, la relación entre el éxito de una sociedad, de un país, y la existencia de una universidad eficiente, vital para alcanzar dicho objetivo; y desbroza con acierto el cúmulo de errores y reformas fallidas que explican por qué la universidad española no ha logrado tradicionalmente llevar a cabo de forma satisfactoria su cometido, como refleja el hecho de que ni una sola de nuestras universidades se encuentre entre las 200 mejores del mundo. Esta obra interesará a profesores, investigadores, padres de familia, estudiantes universitarios y pre-universitarios, empresarios, gestores de lo público y en general a todo el público inquieto por la enseñanza superior en nuestro país.
La autora repasa la trayectoria de la universidad española desde sus comienzos hasta hoy, identifica sus ocasionales éxitos y los largos períodos en los que una regulación inadecuada la ha impedido acercarse a la eficiencia de las universidades de los países de primera línea ?históricamente las de Francia y Alemania, y más recientemente los países sajones y especialmente EE.UU?. Se analizan las sucesivas reformas legales de la universidad española y su reiterado fracaso para promover una universidad de élite y una ciencia capaz de competir con las mejores del mundo, de retener a muchos de los profesores e investigadores más brillantes, de atraer a otros del resto del mundo y, en definitiva, de devolver a la sociedad un rendimiento acorde con los recursos invertidos. La autora es doctora por la New York University y la Universidad de Alcalá, y experta en economía de la educación; ha sido responsable durante cinco años de la política universitaria de la Comunidad de Madrid, y describe aquí su experiencia en la reforma de las universidades de Madrid, que alcanzó éxitos considerables para verse en parte frustrada después por interferencias políticas, pero que constituye un claro ejemplo de la vía adecuada para lograr una universidad de primer nivel.