La ciencia es una forma de conocimiento prestigiosa porque se ha ocupado de objetos simples. A mayor simplicidad —como la matemática o la física—, mayor es el prestigio y el rigor de sus métodos y resultados. Pero nada puede frenar su irresistible atracción por la complejidad, aunque sea por la vía simple. Ideas sobre la complejidad del mundo parte de las llamadas ciencias duras y ahonda en el método científico y en sus conclusiones preliminares para luego alejarse hacia formas de conocimiento nacidas directamente para la complejidad, para ese fenómeno raro llamado vida y para ese otro fenómeno, aún más raro, llamado mente. De este ejercicio surgen ideas sobre otros métodos —como el arte, por ejemplo—, sobre la esencia general del cambio y, en definitiva, sobre la complejidad como estrategia del mundo contra su declive. Quienes hayan seguido, título tras título, la serie Metatemas recibirán este libro de Jorge Wagensberg, director de esta colección, como la clave reveladora de la evolución de su pensamiento, que hasta ahora sólo podíamos entrever a través de los autores publicados en ella. Al lector en general este ensayo le deslumbrará porque suscitará en él inquietudes que yacían latentes, interrogantes elementales («¿Sabemos siquiera lo que deseamos saber ?») que conducen a la revelación del mundo en que vivimos, del mundo que generamos y liquidamos día a día. En esta tercera edición ampliada, el autor añade dos reflexiones que estaban implícitas en la versión original del texto. La primera versa sobre la fuerte sospecha de que sólo existen tres formas de conocimiento : el científico, el artístico y el revelado. La segunda señala una nueva aproximación a la realidad destinada a conmocionar el mismísimo método de la ciencia : la simulación.