Tras publicar Devenir perra, Itziar Ziga reúne esta colección de textos breves, precarios y bastardos. Han sido recuperados a lo largo de los años de múltiples ordenadores ajenos, gracias al nomadismo y a la precariedad que tienen por costumbre amenizar la vida de la autora. A menudo logró rescatar una copia en los instantes previos a cada naufragio, ruptura, huida o mudanza.
Tania Head, Anna Ajmatova, Caster Semenya, Virginie Despentes, Rocío Jurado, Ocaña, Olympe de Gouges y muchas otras divas de su particular altar punk sobrepueblan estas páginas donde la autora se despacha en torno a sus obsesiones: el placer de las raras como venganza, la búsqueda incesante de antepasadas perrunas, el feminismo lascivo y abrupto, la resistencia contra el capitalismo patriarcal?
Porque, se puede escribir sin una habitación materialmente propia pero no se puede escribir sin un precioso zulo interior.
¡Bendito feminismo, bendita Virginia Woolf!