Esta Historia estúpida de la literatura que tienes en tus manos, ¡oh, lector!, no es en absoluto más estúpida que otras muchas muy reputadas que hay por ahí. Lo que sí pretende ser es bastante más divertida, pues se trata de una heterogénea recopilación de artículos y poemas de índole burlesca sobre literatura. Si te atreves a leerla hallarás en ella múltiples géneros cómicos: versos imitativos, falsas reseñas de libros, textos apócrifos, parodias teatrales, burla de las técnicas de los talleres de escritura y otras muchas cosas sorprendentes. Este libro -con todo cariño y dentro de los límites del más estricto buen gusto- pone sabiamente en solfa a los autores pelmazos, a los libros infumables, a los clásicos soporíferos, a la preceptiva académica, a los estudios pedantes, a las investigaciones absurdas y a otros varios aspectos de ese negocio del que comen los libreros y al que muchos se empeñan tontamente en definir como arte literario.
Enrique Gallud Jardiel (Valencia, 1958) pertenece a una familia de raigambre literaria, pues es nieto de Jardiel Poncela, el gran humorista. Es Doctor en Filología Hispánica y ha enseñado en universidades de España y del extranjero. Ha publicado más de una treintena de ensayos literarios, históricos y filosóficos y ha acabado hasta la coronilla de tanta erudición y tanta mandanga. Por ello se ha liado la manta a la cabeza y decidido que, si la literatura tiene como propósito divertir a la gente, tiene que empezar por divertirle a él. Así es que se propone hacer del humor su única patria y reírse del conocimiento sobre autores, libros y movimientos que ha ido acumulando durante su vida y que resulta que, al final, no sirve absolutamente para nada. En este libro se erige en denunciante de tópicos, destructor de mitos, azote de críticos y desmitificador de bodrios literarios, y jura no volver a aburrir a nadie con escritos plúmbeos, como hasta ahora hacía.